Retirada de panales
• El momento ideal es en verano ya que aún hay flores y se puede controlar el “pillaje”.
• Es conveniente utilizar el “escape de abejas”, que permite el paso de abejas desde la cámara de miel a la de cría e impide el retorno, para que los panales queden libres de abejas. Este artilugio lo colocaremos la tarde anterior.
• La hora más idónea es de 11 a 15 de un día soleado y sin viento porque durante ese tiempo la mayor parte de las abejas están en el campo y los panales estarán casi vacíos.
• Actuar con celeridad, pero evitando los movimientos bruscos.
• Lanzar sobre la piquera tres o cuatro bocanadas de humo.
• Retirar el tejadillo y, levantando un poco la tapa interior pero sin retirarla, dar unos golpes de humo para que las abejas se atiborren de miel y se retiren a la parte baja de la colmena.
• Retirar los cuadros empezando por la parte izquierda sacando el primero aunque no tengan miel para que el hueco que deja nos permita maniobrar con holgura.
• Barrer con el cepillo las abejas que se encuentren en los panales que vamos a retirar.
• Terminada la retirada de panales y cerrada la colmena, reduciremos la piquera y recogeremos los restos de panal que hayan quedado por el suelo para evitar el pillaje
Desoperculado
Ya en la sala de extracción, la primera operación consiste en quitar los opérculos que cierran las celdillas para permitir la salida de la miel en el extractor. Para cortar esos opérculos se emplean varios utensilios: cuchillos especiales de doble filo que se calientan con agua, cuchillos eléctricos que llevan un termostato para regular la temperatura, rodillos o peines metálicos de púas que perforan las celdillas, etc. Para el desoperculado a gran escala, existen una máquinas industriales que llevan una cuchilla rotativa accionada por un motor que corta
los panales de forma rápida, pero su alto precio las hacen poco rentables en explotaciones de pequeño tamaño.
Extracción
La estrechez de las celdillas y la densidad de la miel impiden que ésta salga por sí misma, teniendo que recurrir a la fuerza centrífuga que proporciona un aparato llamado extractor, que fue inventado por el italiano Hruschka en 1865.
Existen dos tipos de extractores: tangencial y radial. Ambos se componen de un recipiente cilíndrico de acero inoxidable, de fondo cónico y tapa movible semicircular. En la parte central gira un eje accionado por un juego de engranes y una manivela exterior. Unido al eje va un bastidor con unas cestas o jaulas en las que se colocan los panales.
En la parte más baja un grifo con cierre de guillotina permite recoger la miel. El tipo tangencial es más antiguo y se llama así porque las caras de los panales quedan perpendiculares a los radios del cilindro. Es el más utilizado para mieles muy densas, por ejemplo la de brezo o gayuba. El extractor radial es más manejable, más rápido y de mayor rendimiento. Recibe ese nombre porque los cuadros van colocados como los radios de una bicicleta.
Hoy día los nuevos modelos, tanto tangenciales como radiales, son accionados por un motor eléctrico provisto de
cambio de marchas progresivo para evitar la rotura de panales.
Filtrado y envasado
Una vez extraída la miel es necesario filtrarla y decantarla en recipientes apropiados para quitarle todos los residuos extraños: partículas de cera, granos de polen, burbujas de aire, etc.
El filtrado se realiza con coladores o cedazos de malla metálica fina. Lo normal es emplear dos filtros, el primero de malla más abierta. También se usan filtros de tejido, tipo manguera, que son más eficaces pero más lentos.
El madurador es un recipiente comparable a un bidón que cumple la misión de decantar la miel. Trascurridos unos días de permanencia de la miel en el madurador, la miel ya se puede envasar.
Para volúmenes importantes de miel se utilizan como es lógico máquinas muy sofisticadas: bancos decantadores, bombas, mezcladores con tornillo helicoidal, envasadoras automáticas, etc.
Fuente: Felix Herrero García LAS ABEJAS Y LA MIEL EDICIÓN CAJA ESPAÑA. Depósito Legal: LE-593-2004
I.S.B.N. 84-95917-14-9 Imprime: Rubín, S.L.